jueves, 11 de febrero de 2010

Rojo y verde

Que dije que me iba y me fui, que dije que me olvidaría de ti y en eso estoy, poco a poco; pero me siento confundida, ¿Qué es lo que salió mal? ¿Qué es lo que yo no entendí?...Yo que pensaba que éramos inseparables, que todo iba bien.
Me han dicho muchas veces que lo que se acaba, se acaba, que hay que tirar del día a día, pasar página y olvidar.
Te pido perdón, salí corriendo, tenía que ir a casa a bajar mi corazón de las nubes y es que me pasó de nuevo, me volví a confiar, borré el miedo de mis sentimientos, no le quise dar cabida y ahora es el orgullo quien me llama tonta, tonta por creer, tonta por confiar, tonta sin más...
Me quedo con lo bueno, a kilómetros de distancia me doy cuenta de que no me haces falta, que no eres tan imprescindible como yo creía, que no somos inseparables. Y es que no tengo nada que contarte, ya no me queda nada que ofrecerte.
Ahora que me he ido, se qué hacer...Con la ciudad puesta del revés, todo se tiñe de rojo y verde y si a tu recuerdo le da por volver, dile que estaré asomada en la ventana contando estrellas...
Que de este juego de niños inocente ya me he cansado, basta ya de tonterías, si acaso pasemos a jugar de forma diferente...

No hay comentarios:

Publicar un comentario