Cuatro años pasan rápido ante las inquietantes miradas de los demás, que esperan impacientes verte triunfar. Han apostado tanto por ti, que el solo pensar en fracasar te hace apostar fuerte, casi aún más que ellos y al final es que ya no sabes si en esta vida luchas por ellos o por ti.
Te atemoriza fracasar y créeme que es normal, a ellos les atemoriza que tu no llegues a ser nadie en la vida...Todos hemos pasado por lo mismo.
Te levantas cada mañana dispuesto a dar lo mejor de ti, para que paso tras paso llegues a ser esa persona que todos esperan que seas.
Pero ante todo, no te agobies, no pasa nada si no llegas a la cima, siempre que hayas ido construyendo un buen camino del que todos puedan sentirse orgullosos.
Además, hay algo que debes de tener claro, que solo por existir ya eres alguien en la vida y aunque quieras ser eso que los demás quieren que seas (que no siempre es lo mismo que tu quieres) no te olvides que primero estás tú y luego los demás. Lucha por lo que TÚ quieres y no por lo que quieran los demás.
Esta vida es corta, como para malgastarla en lo que los demás quieren. Mejor dar mil vueltas hasta que encuentras tu camino, a no dar ninguna porque hayas dejado que los demás tomaran esa decisión por ti.
"Y es que lo que digan los demás está de más..."
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