lunes, 26 de septiembre de 2011

Entre X e Y

Y aquí estoy otra vez, decidiendo entre X o Y.


Es curioso como en un momento puedes pasar de tener todo claro a embarcarte en una larga aventura de dudas por un mar infinito y eso que dicen que el mundo es redondo... Y realmente, no sé cuándo de pronto llegas a ese momento en el que apareces en el mismo lugar en el que estabas, con todas tus dudas resueltas. Supongo que tampoco debe ser eso lo más importante, por que aquí sigo mientras tanto, decidiendo entre X o Y.


Y es que no se trata de analizar lo bueno o lo malo y para qué vamos a molestarnos en comparar, con lo odioso que puede llegar a resultar eso. 


X o Y...ya podría ser Z. Tres variables, dos oportunidades, tan solo un camino... Coser y cantar...


Piensas, das vueltas, te tomas un café...
Piensas, te asomas a la ventana, ves la pida al revés...


¿Fue esa tarde en la playa donde me cogiste de la mano o esa mañana en la que me enseñaste lo que significaba el infinito?


Tres meses tardó la manzana en caer del árbol...sí, tres maravillosos meses tardó mi X, tan brillante, tan dulce, tan frágil, tan...perfecta, lo tenía todo claro... Pero no tardó ni un año casi en aparecer mi Y, dando fuerza a mi vida, haciéndola vibrar... ¿Y mi Z?


Puntos en un mapa, un mundo que da vueltas y yo... que me quedé sentada a esperar un final, viendo mis letras pasar. ¿Qué quedó al final? Una X infeliz, una Y desdichada y una Z que jamás apareció... Curioso final.

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